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La vieja casa tenía un gran jardín descuidado y sólo un tembloroso álamo conservaba sus flores.
Mi curiosidad hizo que franqueara la entrada. Una jaula de oro presidía un porche con arcos ojivales. Dentro, diminutas criaturas parecían petrificadas con mi presencia.
Intenté rozar uno de esos seres y al tacto desapareció reproduciéndose en otro lugar de aquella cárcel.
Sentí pena e intenté abrirles la puerta. No pude.
Miré hacia el álamo y acerqué una de sus ramas.
Fue mágico, desaparecieron todos sus miedos y, uniendo sus fuerzas, rompieron los barrotes.
Ahora son libres y felices entre las flores del Aspen
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La descripción del Dr. Bach
Temores vagos y desconocidos, para los que no se puede dar ninguna explicación, ni razón. Sin embargo, el paciente puede estar aterrorizado de que algo terrible vaya a suceder, sin saber qué. Estos miedos vagos e inexplicables pueden acecharle de noche o de día. Los que lo padecen a menudo tienen miedo de contar sus preocupaciones a los demás.
En esta ocasión Lidia Castro Navas nos invita a componer un relato con la imagen de la carta, el símbolo del dado y de añadido la flor Aspen.
Estará todo incluido en un texto de no más de cien palabras.