¡Uf!... más curiosos

Buenos días señores, no esperaba visita, pero adelante, sean bienvenidos. Yo soy Ambrosio y cuido tanto de la casona como de sus alrededores. Pueden pasar sin miedo a las dependencias de esta vieja casa. Aunque parezca que sus muros están a punto de darnos un susto, no se preocupen, solo son apariencias. Los primeros dueños gastaron grandes sumas de dinero en su construcción y puedo asegurar que los materiales son de primera calidad. Lastima que su estancia en ella no fuera muy afortunada. Yo no llegué a conocerlos, llevo aquí poco tiempo, pero tengo entendido que algo raro pasaba mientras ellos estuvieron viviendo aquí. Decían que se escuchaban ruidos en los tejados. Posiblemente fueran ratones. Seguro que no tenían un buen gato que les librara de semejantes roedores.

Casa encantada Foto tomada de la red

También he escuchado decir que alguien se aparecía en uno de los dormitorios y hacía la vida imposible a aquel que dormía en esa dependencia. Yo no creo nada de eso, más bien parece una excusa para no ocupar dicha habitación, creo que era la que roza la ventana la rama de la higuera que hay en el patio trasero.

La verdad es que ese patio está muy descuidado. Los árboles, antes llenos de hojas y frutas, ahora presentan largas ramas deshojadas y escuálidas. Por las noches parecen brazos de esqueletos que amenazan con apoderarse de la casa y como nunca nadie cortó sus ramas y mucho menos las de la higuera, por lo de la superstición ¿saben?, estas ramas tocan los cristales de la ventana de ese dormitorio donde nadie quiere dormir. Pero no me hagan caso a veces me dejo llevar por la imaginación...

¿Por qué no echan un vistazo al interior? Puede que quieran descansar un rato. El camino desde el pueblo hasta aquí es muy largo, empinado y está lleno de maleza. Pero pueden sacar agua del pozo para refrescarse. Claro que… puede que huela y sepa mal ¿estará aún ahí el niño muerto?ejem... ejem... no me hagan caso, quizás será mejor que tomen el agua de uno de los riachuelos… Disculpen que no les sirva algo de beber. Como no esperaba a nadie, además hace tanto que no voy por el pueblo.

Todo lo que necesito para mi subsistencia lo obtengo de estos alrededores. Habrán comprobado que para llegar hasta aquí hay buenos bosques de nogales, castaños, pinos en algunos de estos aún se ven las cuerdas de algún suicida, pero eso no debe preocuparles, su espíritu solo se hace notar en contadas ocasiones; bueno como les decía hay muchos árboles de sombra donde puedo dedicarme a la caza con gran fortuna por mi parte y siempre hay algún pájaro que sacia mi apetito. También entre los arbustos que rodean la mansión encuentro conejos, liebres y faisanes y, si me apetece pescado, en los arroyos que bajan de la montaña consigo carpas, lucios y truchas que están de fábula.

Árbol tétrico Imagen tomada de la red

Pero ustedes siguen aquí en la entrada indecisos y no es mi cháchara lo que les impide entrar ¿tienen miedo? Tranquilos, si van con cuidado no les pasará nada. Hay un peldaño, el cuarto… ¿o es el tercero? quizás es en la escalera que da al sótano… bueno, ahora no lo recuerdo, pero hay un peldaño que tiene malas pulgas. A veces se levanta la madera y más de dos visitantes han caído rodando y lo peor ha sido al querer agarrarse al pasamanos que este se mueve y… bueno no le aconsejo que se agarren a él.

Vamos, vamos, adelante… eso es. No se asusten si escuchan algún ruido que no saben de dónde llega, o algún llanto, o tal vez ruido de cadenas… no hagan caso, esas cosas solo se escuchan si se quieren escuchar, ustedes se hacen los sordos y aquí no pasa nada.

Vaya, ya se han asustado, y todo porque la puerta de la entrada se ha cerrado de golpe. Como si nunca hubieran escuchado una puerta cerrarse. ¿Aún no se deciden a subir al primer piso? Ah, que se van a quedar aquí abajo. Bueno, pueden descansar aquí, pero les pido que no pasen a esa habitación, era de los antiguos criados y creo que hacían cosas raras con una tabla y un vaso… mejor obviar esa dependencia, yo mientras voy a dar un paseo por los alrededores, llevo mucho tiempo sin hacer mi ronda. Ahora vuelvo.

***

Mejor será que me quede aquí observando. ¿Qué estarán haciendo? Vaya otra vez lo mismo de siempre. La tablita dichosa. De nuevo a molestar a los señores. Pues hoy está la luna en la fase propicia para atraer a los espíritus, me temo que esta noche va a ser movidita.

Lo dicho, todo empieza de nuevo, estos cazafantasmas no escarmientan. Siempre las mismas preguntas “‒¿hay alguien ahí? ¿puedes mover este vaso? ¿cómo te llamas? ¿estás muerto?” Y los viejos dueños están bastante cabreados, todos los fines de semana igual. Y no digamos los criados, que no paran de rascar la cera de las velas y de limpiar tanto círculo y estrella de seis puntas que pintan en el salón, Es que no hay un respeto. Aún no se han percatado pero ya empiezan a manifestarse los primeros resultados a su petición. Estos van a pagar hechas y por hacer.

Lo dicho, los criados han empezado a arrastrar las camas, el señor toca un violín desafinado y la señora llora y se lamenta mientras el niño del pozo anda transparente dejando pisadas de agua por delante de ellos.

GARFI foto de Vitolosa, agosto 2019

Tengo que volver de nuevo, hay que poner orden o esto va a acabar mal. Pero ¿a dónde van tan deprisa? ¿se marchan? ¿No quieren pasar la noche aquí? ¡Oigan, que se dejan las mochilas! ¿que me quede con ellas? ¡gracias!

Bueno, siempre es así, yo me alegro de que hayan decidido hacer una visita a la casa. A veces estoy algo aburrido. Ahora voy a invitar a mi gatita a darnos un festín con todos estos bocadillos tan apetitosos que han dejado y después a dormir un ratito. Pero qué agitada es la vida de un gato.

El primer desafío en este mes de noviembre consiste en escribir sobre una casa encantada, o eso es lo que dicen. En ella debe aparecer -en mi caso- UN GATO. aunque sea de pasada. Yo le he dado algo más de protagonismo.

https://jessi-ga.wixsite.com/fantepika/post/desaf%C3%ADo-literario-noviembre-la-maldici%C3%B3n-de-la-casa-ludwig